Raúl Lozza

Pocas veces en el arte y la vida se da un caso como el de Raúl Lozza. Un artista que ha pasado la mayor parte de sus 95 años de existencia trabajando, investigando, buceando en las profundidades del arte. Buscando caminos inexplorados que conduzcan a nuevos mundos de la forma y el color.

Lozza es un artista integral que ha fusionado su labor, sus ideas, su concepción de la sociedad con una férrea disciplina. Una rutina de trabajo fundada en el ritual cotidiano de iniciar con cada madrugada el desafío de la creación.

Esta muestra de Raúl Lozza forma parte de una serie de reconocimientos que inició el Museo Nacional de Bellas Artes Neuquén casi a la par de su nacimiento: honrar a aquellos que han dedicado toda su vida al arte y a la investigación.

Por esa senda transitan el arquitecto que ideó este espacio, Mario Roberto Alvarez, y también Luis Tomasello, León Ferrari, y ahora Raúl Lozza, talentos que no casualmente han llegado a orillar el siglo de vida.

En un mundo en que los ejemplos de vida parecen escasos y los jóvenes vagan buscando una luz que los saque de la oscuridad de la incertidumbre, estas existencias ejemplares pueden ser el faro que los rescate de la tormenta.

Lozza trae consigo su propia historia. La de alguien decidido a revolucionar y revolucionarse.

Esta obsesión lo llevó a entrecruzar los caminos de su arte con la física y las matemáticas, la mecánica cuántica y la relatividad, pero también con las lecturas de Apollinaire, Vicente Huidobro o Pablo Neruda. Como los antiguos alquimistas que acopiaron el conocimiento de la humanidad en la búsqueda de la piedra que albergara el sol.

Pero, también Lozza se destaca como un artista preocupado por correr el velo de la mera ilusión que él veía en la obra de arte, trayéndola al mundo cotidiano del hombre para insertarla entre sus pequeñas cosas y rutinas, volviéndola un objeto concreto.

Así nacieron conceptos innovadores que hoy mantienen plena vigencia.

“Perceptismo” o “Teoría estructural del color”, son movimientos gestados por Lozza hace más de 60 años y que abrieron nuevas rutas en las artes plásticas.

Hoy Lozza continúa trabajando como lo ha hecho siempre en ese desentrañamiento meticuloso y lúcido del Universo. Buscando en cada forma y en cada tonalidad la clave de un mundo más digno donde poder vivir mejor.

Oscar Smoljan – Director MNBA Neuquén