Por primera vez Neuquén es sede inaugural de la Muestra Anual de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA). Institución que, nacida en el año 1942, agrupa a los fotoperiodistas argentinos y promueve la defensa de los principios éticos y profesionales de su actividad, al igual que la libertad de prensa y el derecho a la información ciudadana.
Es un orgullo para el Museo Nacional de Bellas Artes Neuquén, el Museo Gregorio Álvarez, la Sala Emilio Saraco y, en especial, para nuestra ciudad, ser anfitriones de la primera inauguración, que se lleva a cabo en el interior del país, de esta valiosa y prestigiosa exposición. Valga recordar que, desde su primera edición de 1981, ha venido acompañando, año tras año, nuestro propio desarrollo cultural.
Hemos decidido dedicar nuestros tres museos para alojar estas imágenes pertenecientes a la historia reciente de nuestro país. Entendemos que la fotografía y, con mayor razón, el llamado fotoperiodismo, configura un testimonio fidedigno del acontecer histórico, captado en el sucederse mismo de sus instancias protagónicas y consignado desde la fuerza expresiva que le es propia.
En estas imágenes -muchas de ellas familiares para el visitante a través de las primeras planas de diarios y periódicos-, la realidad, abrumadora y trágica, conmovedora o cruel, ingresa de lleno en el arte a partir de la visión singular e intransferible de su creador que es, a la vez que testigo, cronista y artista.
El fotógrafo, pero mucho más el reportero gráfico, posee el don peculiar de atrapar en un instante –en milésimas de segundo- el pantallazo que habrá de congelar la realidad para la posteridad. Si a ello se le agrega la posibilidad de sumarle la propia mirada editorial, de dotar a la fotografía del juicio que ese mismo fotógrafo se forma acerca de lo que ve a través de su objetivo, entonces la imagen que vemos al día siguiente en cualquier medio gráfico no deja de rozar al arte conceptual.
En esta colección hay pasajes de nuestra propia vida como sociedad en sus instancias evolutivas. Nuestros pequeños o grandes momentos de dicha o de dolor, nuestros traspiés cívicos y los retratos de los actores de esa misma historia, son capturados, en instantes fugaces para el ojo humano, por ese obturador de la Historia que acciona el fotógrafo.
Recorrer esta muestra será para todos nosotros recorrer nuestro propio tiempo, a la vez que echar una mirada sobre nuestra propia condición de argentinos.
Oscar Smoljan- Director del MNBA Neuquén
